La comida y la bebida son uno de los mayores placeres de la vida. Sin embargo, después de una cena copiosa, la sensación no suele ser tan buena. Esto puede provocarnos retenciones de agua por el exceso de sal y sentirse hinchado y sin fuerzas. Puede ser tentador encontrar una forma rápida de eliminar el exceso de agua recurriendo a un remedio de venta libre, pero siempre es más recomendable buscar los mejores diuréticos naturales.
¿Qué hacen los diuréticos?
Los diuréticos son algo bastante sencillo: ayudan al cuerpo a deshacerse del exceso de agua y sal acumulada. ¿Cómo lo hacen? Haciendo que orines más.
Los diuréticos son útiles si se tiene una enfermedad que te hace retener agua, como la insuficiencia renal o la insuficiencia cardíaca congestiva. De hecho, también suelen incluirse en la formulación de los medicamentos utilizados para tratar la hipertensión arterial.
¿Existen diuréticos naturales?
Aunque los diuréticos suelen presentarse en forma de píldora, hay alimentos y actividades que se consideran diuréticos naturales.
Frutas y verduras
Las frutas y verduras con base de agua no sólo aportan vitaminas y minerales, sino que también pueden ser buenos diuréticos naturales. Se recomienda añadir estos alimentos diuréticos a la dieta:
- Limones.
- Apio.
- Ajo.
- Cebollas.
- Pimientos.
- Sandía.
- Pepinos.
- Jengibre.
- Uvas.
- Espárragos.
- Piña.
Hierbas
Algunas hierbas, como el perejil y el diente de león, se consideran diuréticos naturales. El truco está en cómo se usan. Evita tomar medicamentos o hierbas en forma concentrada si tu necesidad de liberar líquidos retenidos no está relacionada con la enfermedad, la medicación o la indicación de un médico. Definitivamente, no se recomienda el uso de medicamentos diuréticos o hierbas sin el asesoramiento adecuado de un profesional sanitario certificado.
La razón se reduce a la ciencia, o a la falta de ella. Las hierbas no están muy reguladas ni investigadas. En general, es difícil manejarlas y determinar la dosis adecuada porque no hay suficientes estudios clínicos que demuestren la cantidad que realmente debe tomarse. Algunas hierbas pueden interactuar mal con los medicamentos que se toman y causar problemas de salud.
Las mismas directrices se aplican al uso de bayas comúnmente promocionadas como diuréticas, como el espino y el enebro.
Sin embargo, se puede conseguir un efecto diurético espolvoreando perejil en la ensalada, el arroz, la salsa o la sopa, o añadiendo la hierba a un batido o zumo. Incorpora las hierbas a tu dieta a través de la nutrición, no en forma de pastillas o concentrados líquidos. El té de hibisco, de hierbas y sin cafeína, es otra buena opción.
Cafeína
La cafeína es un diurético natural, lo que es una suerte para las personas a las que les gusta el café y el té. El té negro y el verde son los mejores si buscas bebidas diuréticas, entre otras cosas porque sabes la cantidad que estás tomando. Los tés son un poco más fáciles de regular ya que tomas una bolsa de té. No estás tomando una píldora, una vitamina o un concentrado.
