Muchas personas suelen levantarse de mal humor, e incluso llegan al punto de no soportar ni una sola palabra, ni siquiera unos buenos días, hasta después de cierto tiempo o hasta después de desayunar.
Este tipo de personas se levantan frunciendo el ceño, gruñiendo, gimiendo o rogando unos minutitos de más para estar en la cama. A esto hay que sumarle que, a este tipo de personas, suelen costarles levantarse de la cama, e incluso puede ser una cuesta arriba mañana tras mañana.
Por ello, hoy vamos a dar unos cuantos consejos y hábitos que, aplicándolos diariamente, al final el cuerpo se acostumbra, y harán que nos levantemos mucho más activos y contentos de lo normal.
Para la noche anterior.
1- Rutinas.
Aunque seamos seres humanos, no dejamos de ser animales, y como tales, nuestro cuerpo está acostumbrado a una serie de rutinas, llegando incluso, a sentirse nuestro cuerpo extraño cuando cambiamos radicalmente de rutina.
Un consejo muy útil para descansar al 100% y levantarse con las pilas cargadas, es tener una serie de horarios de sueño, tanto de horas dormidas por la noche, como de horarios para acostarse y cenar.
Algo muy importante es que no se debe de acostar una persona con el estómago lleno o con comida pesada, ya que, en ese caso, nuestro organismo hará la digestión mientras dormimos, sin llegar a quemar nada de dicha cena o comida.
2- Tiempo al tiempo.
Otro aspecto muy importante es relajarse. A día de hoy es muy complicado saber separar la vida profesional de la vida personal, y más teniendo una serie de dispositivos como el Smartphone o la Tablet, todo el día a nuestro lado. Incluso cuando creemos que no estamos trabajando, probablemente lo estemos haciendo. Por ello, es muy importante antes de dormir, desconectarse de todos estos dispositivos, relajarse y pensar en lo que se ha hecho durante el día y en lo que hay que hacer al siguiente día.
3- Aplícate tus propios rituales.
Un truco para descansar más por la noche, es utilizar una serie de “rituales” antes de dormir. No estamos hablando de rituales religiosos, ni mucho menos, sino, por ejemplo, de coger la costumbre de leer una serie de capítulos de un libro, ojear una revista, o simplemente, mantener una conversación sana con tu pareja.
4- Adiós luz.
Antes de dormir es conveniente apagar todas las luces que emiten los aparatos electrónicos de nuestro alrededor, ya que, en caso de no hacerlo, directa e indirectamente dichas luces nos perturbarán durante la noche.
Una vez nos levantemos.
5- Las apps están para algo.
Al igual que utilizar el móvil por la noche puede llegar a ser perjudicial, por las mañanas es nuestro fiel amigo de compañía.
Existen multitud de apps que no sólo funcionan como despertador, sino que, en algunos casos, nos obligan a realizar una acción determinada, como, por ejemplo, ir al salón a hacerle una fotografía a la televisión. Esto mismo nos ayudará a despertarnos de golpe, y probablemente, después de dicha acción, ya no nos apetezca volver a meternos en la cama, con tal de no volver a ir al salón o a otra instancia de la casa a hacer más fotos.
Otras apps hacen que tengamos que resolver una serie de puzzles, activando automáticamente las neuronas y los procesos cognitivos.
6- Siempre positive, nunca negative.
¿Para qué levantarse gruñiendo, pensando en todo lo negativo que te puede llegar a deparar el día si se puede levantar uno con una sonrisa en la oreja y pensando en positivo, en que el día va a ser bueno y productivo? Todo es mental. Si piensas que algo va a salir mal, probablemente saldrá mal, por el contrario, si se piensa en positivo, se atraerá la positividad. Somos energía, y como tal, atraemos otros tipos de energías. Así que piensa siempre en positivo. Ríete del mundo, y él se reirá contigo.
7- Productividad.
Quizás sea increíble, pero por la mañana nuestra mente es cuando más productiva y creativa está, así que aprovecha esa ventaja, y apunta todas las ideas que tengas, lee, y sobre todo disfruta de lo que haces.
