Halitosis es el término médico para el mal aliento, y si alguna vez lo has tenido, no deberías sentirte mal. Alrededor de 1 de cada 5 personas de la población la padece, y muchas personas que creen tenerla en realidad no la tienen.

La paranoia se debe probablemente al estigma social que la gente pone sobre los que tienen mal aliento. En algunos casos, las causas del mal aliento son sencillas y se pueden prevenir, por lo que otros se apresuran a condenarlas, pero hay raras excepciones en las que la halitosis de alguien puede requerir realmente atención médica. Conocer las causas del mal aliento puede ayudar a marcar la diferencia. En la mayoría de los casos, el mal aliento no es grave, pero si persiste durante más de unas pocas semanas, puede ser evidencia de un problema subyacente más profundo.

Causas del mal aliento

Para deshacerse del mal aliento, lo primero que hay que saber es por qué se produce. Básicamente, hay 10 causas comunes del mal aliento:

  • Beber y consumir ciertos alimentos y bebidas: Se sabe que ciertas bebidas y alimentos, especialmente el café, el ajo y la cebolla, crean mal aliento. Nos encantan por su sabor, pero ese sabor puede perdurar una vez que se absorbe en el torrente sanguíneo. No sólo se expulsa el olor a través del aliento, sino que los olores persisten hasta que el cuerpo procesa los alimentos.  
  • Acumulación de placa: Cuando no te cepillas los dientes correctamente o con la suficiente frecuencia, pueden formarse bacterias en la boca, y ésta es una de las principales causas del mal aliento. Estas bacterias se alimentan de las partículas de comida que quedan en los dientes y las encías y producen productos de desecho que desprenden olores desagradables. Si tienes aparatos de ortodoncia, debes tener especial cuidado en eliminar las partículas de comida de tu boca para evitar el mal aliento.
  • Uso infrecuente del hilo dental: Cuando no se utiliza el hilo dental, las pequeñas partículas de comida pueden quedar atrapadas entre los dientes y alrededor de las encías. Son lugares difíciles a los que un cepillo de dientes no puede llegar. Cuando las partículas de comida se atascan, empiezan a acumular bacterias, lo que a su vez provoca mal aliento y placa.
  • Bacterias en la lengua: Las bacterias en la lengua son responsables del 80-90% de los casos de mal aliento. Una mala higiene bucal hace que la placa bacteriana permanezca en los dientes y las encías. Estas bacterias producen productos de desecho con un olor desagradable que provocan el mal aliento. 
  • Fumar: Fumar es una de las principales causas del mal aliento. Tu cuerpo te agradecerá que dejes de fumar, y tus amigos también. Puede provocar un grave mal aliento y es posible que ni siquiera lo notes porque estás acostumbrado al olor. El mal aliento puede deberse a otras razones, pero el consumo de tabaco es una garantía de mal aliento. Si estás preparado para dejar de fumar, acude a tu médico o dentista para que te aconseje y te apoye.
  • Boca seca: cuando la boca está extremadamente seca, no hay suficiente saliva para eliminar el exceso de partículas de alimentos y bacterias. Con el tiempo, esto puede causar olores desagradables si se acumulan en los dientes. El estrés y la respiración bucal también pueden ser causas de sequedad bucal, y algunos medicamentos tienen la boca seca como efecto secundario. Bebe mucha agua para mantenerte hidratado. La respiración bucal también puede hacer que la saliva que produce se evapore rápidamente. Por eso, muchas personas que respiran por la boca cuando duermen tienen la boca seca y se despiertan con mal aliento.
  • Aliento matutino: Tu boca produce menos saliva mientras duermes, por lo que las bacterias de las partículas de comida se multiplican más rápido mientras duermes, especialmente si no te has cepillado y limpiado los dientes con hilo dental antes de acostarte. Por eso, el olor a mal aliento suele ser más fuerte cuando se despierta. 
  • Infecciones. Si está a punto de someterse a una intervención quirúrgica en la boca (como la extracción de las muelas del juicio), asegúrese de estar atento a las infecciones. Su profesional de la salud puede prescribirle antibióticos para ayudar a minimizar la infección. Si le extraen las muelas del juicio u otros dientes, es posible que también tenga que lidiar con el mal aliento. Cuando se extraen los dientes, las bacterias pueden entrar en las llagas y esta es la causa de la halitosis. Tu dentista puede proporcionarte antibióticos para ayudarte, pero si la infección persiste y provoca un mal aliento crónico durante más de unos días, es posible que tengas que visitar a un dentista para que limpie la herida. Las bacterias también pueden infectar las encías cuando no están sanas o cuando están comprometidas por otros problemas de salud o lesiones físicas.
  • Condiciones médicas: el mal aliento puede ser el resultado de ciertas condiciones médicas como cálculos en las amígdalas, infecciones del tracto respiratorio, bronquitis crónica, diabetes, trastornos gastrointestinales, enfermedades del hígado o del riñón. Si tiene mal aliento crónico y su dentista ha descartado cualquier problema de salud bucodental, acuda a un profesional médico para que lo evalúe y determine si está relacionado con una enfermedad.
  • Goteo postnasal: Si tienes sinusitis o inflamación de los senos paranasales, la mucosidad puede quedar atrapada en la parte posterior de la garganta, lo que puede provocar un goteo postnasal. Las bacterias pueden acumularse en la mucosidad y, para empeorar las cosas, ahora tienes mal aliento después de una gota nasal. A menudo, beber mucha agua y tomar un descongestionante puede ayudar con la sinusitis, pero si tiene síntomas graves o sus síntomas duran más de unas semanas, debe consultar a su médico.

Medicamentos para el mal aliento y cómo eliminar el mal aliento

Si buscas un remedio rápido para el mal aliento, estos sencillos consejos pueden ayudarte a combatirlo a corto plazo.

  • Morder una manzana crujiente es una buena manera de refrescar el aliento antes de empezar a cepillarse los dientes.  
  • Chicle sin azúcar: No sólo refresca la boca con su sabor, sino que ayuda a eliminar las partículas de comida y aumenta la producción de saliva, lo que puede ayudar a refrescar el aliento.
  • Bebe más agua: La sequedad de boca puede provocar rápidamente mal aliento y suele ser la culpable del aliento matutino. Asegúrate de mantenerte hidratado, y ten un vaso de agua en tu mesilla de noche para poder cogerlo rápidamente cuando te despiertes.

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