Internet supone una gran revolución a nivel mundial tanto para las comunicaciones sociales como en el mundo laboral, en el que esta herramienta puede ser muy útil y beneficiosa… o todo lo contrario. Y sino que se lo digan al sector farmacéutico en Alemania.
El funcionamiento de las cadenas de distribución farmacéutica alemanas puede peligrar. Hace unas semanas la cadena de farmacias germana Bienen-Apotheke comenzó a colaborar con Amazon para que el gigante de la logística se convierta en su socio en el reparto a domicilio de medicamentos de venta libre (aquellos que pueden comprarse en droguerías y supermercados: alcohol, algodón y algunos suplementos alimenticios) y productos de parafarmacia.
La web de Apotheke explica en un artículo que los clientes que acuden a su farmacia pueden recibir sus pedidos en casa en tan sólo una hora con el servicio Premium de Amazon.
¿Cómo funciona?
Este servicio se realiza mediante una aplicación informática. A través de ella, los consumidores acceden al stock de productos farmacéuticos y de parafarmacia de las farmacias más cercanas a su zona y poder realizar su encargo. Todo ello con la comodidad que supone no salir de casa.
Por su parte, el farmacéutico recibe el pedido a través de la aplicación y notifica a Amazon que sí dispone del producto que le ha pedido el cliente. Y aquí es donde entra en juego la compañía logística, que será la que recogerá el producto que le entregue el farmacéutico y lo entregará en el domicilio del paciente.
El pedido tendrá que ser algo grande, ya que hay que realizar una compra mínima de 20 euros. Además, si el cliente desea recibir su pedido en casa en una hora tendrá que pagar 6’99 euros adicionales. Si no, ha de acogerse al reparto habitual (de lunes a sábado) y dentro de un intervalo de tiempo de dos horas (a elegir), aunque deben tener en cuenta que los plazos de entrega variarán dependiendo de la apertura de las farmacias. Las de Bienen-Apotheke funcionan desde las ocho de la mañana hasta las diez de la noche.
¿Repercutirá de forma negativa en el sector?
Esta asociación no ha quedado exenta de polémica, pues nadie sabe cómo repercutirá esta asociación en el sector farmacéutico. ¿Quebrarán muchas empresas de distribución farmacéutica y farmacias o se verán favorecidos?
Uno de los socios de Bienen-Apotheke, Michael Grintz, no cree que esta medida sea negativa para el sector, al contrario, y enfatizó en la gran oportunidad que supone utilizar las estructuras tanto logísticas como publicitarias del gigante Amazon.
En ese sentido, ¿el trabajo en una farmacia puede reinventarse con este tipo de asociaciones? Es posible, pues si los pacientes hacen mucho uso de este tipo de compras, en muchas farmacias de la cadena prepararán muchos más pedidos en lugar de dispensar los medicamentos de la manera tradicional: cara a cara. Apotheke especifica en su web que los farmacéuticos de la cadena (que posee 15 farmacias) estarán disponibles telefónicamente durante las horas de apertura para resolver las dudas de los pacientes.
Hasta que no pasen unos meses (o años) y veamos cómo funciona en Alemania, no sabremos cómo afectará a las farmacias y cadenas de distribución: si cientos de farmacéuticos serán despedidos o, por el contrario, si necesitarán contratar más personal en las farmacias. ¿Amazon llegará a convertirse también en socio de las distribuidoras farmacéuticas españolas algún día?